Institucional
Comunidad Papa Giovanni XXIII

Fue creada a finales de la década de 1950 por el Padre Oreste Benzi, quien quería formar una asociación que ayudara a los jóvenes necesitados de la localidad de Rimini (Italia). Hacia 1985 y producto de sus actividades misioneras la comunidad comienza la apertura de "casas familias", expandiéndose por todo el mundo y en especial en los países mas afectados por el desarrollo.
En 1995 nace el SERVICIO ESCUELA, una tarea que contempla el compromiso de la comunidad con la integración escolar de las personas, enfatizando en la necesidad de ayudar a los niños y a las personas con capacidades diferentes. En 1998 recibe el reconocimiento del Consejo Pontificio que reconoce a la comunidad como Asociación Privada Internacional con derecho pontificio (reconocimiento que seria confirmado en 2004).
Durante las primeras décadas del sXXI la comunidad continua con su expansión, llegando a los países de América del sur e instalándose en argentina a principios de 2012. el trabajo de la Comunidad fue reconocido por la ONU en 2009.
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Otras sedes de la comunidad
Historia
El centro de apoyo escolar se instaló en el Barrio Limache a principios de 2012 cuando, gracias al visto bueno por parte del representante de la Parroquia Encarnación del Verbo [Pbro. Víctor Hugo Diaz] y el consejo parroquial,los delegados de la comunidad Papa Giovanni XXIII en Argentina (sr. Arturo Mottola y Sra. Victoria Garnica)consiguieron la aceptación de sus propuestas y proyectos, ademas de un espacio físico dentro del predio de la parroquia para crear el centro de apoyo. Éste tiene como fin desde sus principios ayudar, brindar contención a niños en edad escolar y ser una solución a los problemas de la calle que tanto aquejan a la niñez y la juventud zonal.
Desde su surgimiento el centro se ha mantenido y enriquecido gracias al aporte de todas aquellas personas que participaron como voluntarios a lo largo de los años. Durante el primer año eran los familiares de los delegados de la comunidad quienes hacían el voluntariado. Pero desde 2013 varios vecinos e, incluso, dos profesionales italianos participaron como voluntarios.
Durante 2016, a través de convenios firmados con las dos universidades mas importantes de la ciudad, un nuevo grupo de voluntarios se sumó a colaborar con la institución a través de la realización de distintos talleres que refuercen las capacidades y el buen desarrollo de los niños.
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A lo que nos dedicamos
Ofrecer una oportunidad a los niños de estudiar, hacer deporte, danza, crecer como persona. Darles una posibilidad de acceder a aprender y desarrollarse con los compañeros, practicar valores, mejorar en la escuela.
Desde la razón de ser social, que tiene la organización, el ser una "alternativa a la calle" se trabaja la problemática a través de la cual, se despliegan múltiples acciones que conforman todo un esquema desarrollado en la búsqueda por integrar a los niños a la vida social.